Primero, un poco de estadísticas sobre el metro de Moscú.
Todos los días alrededor de 10 millones de pasajeros usan el metro.
Alrededor de 150 personas se suicidan al saltarse delante de los trenes rápidos cada año.
De hecho, saltan más personas, pero no todos que lo hacen necesariamente se mueren. Unos tienen buena suerte, aunque sufren heridas graves, como el hombre de este video (el video fue cortado para no ser demasiado escalofriante).
El joven quise matarse, pero sobrevivió. Solo se le rompieron las piernas.
Hay muchas razones para querer acabar con la vida y cada caso es deplorable, no hay dudas. Sin embargo, la gente de Moscú sigue un dicho ruso al efecto de que Moscú no cree en las lágrimas. Eso explica el apodo cínico que les dan a las mujeres -y a los hombres- que intenta suicidarse – “Ana Karénina”, el personaje principal de la novela del mismo nombre de León Tolstói.
La actriz Mariya Guérmanova (Мария Германова: 1884-1940) en un fotograma de la película de 1914 Anna Karénina (Анна Каренина), dirigida por Vladímir Gardin (Владимир Гардин: 1877-1965).